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Las conversaciones de cinco horas entre el presidente ruso Vladímir Putin y el principal negociador del presidente estadounidense Donald Trump parecen no haber logrado avances hacia un acuerdo de paz para Ucrania.

Un portavoz del Kremlin declaró que la reunión en Moscú fue “constructiva”, pero que algunas partes del plan son inaceptables para Rusia.

El enviado especial de Trump, Steve Witkoff, y su yerno Jared Kushner participaron en las reuniones tras semanas de intensas gestiones diplomáticas destinadas a poner fin a la guerra. La delegación estadounidense no hizo comentarios tras abandonar Moscú.

A primeras horas del martes, Putin afirmó que las modificaciones propuestas por Kiev y Europa al borrador del plan de paz respaldado por Estados Unidos eran inaceptables, y agregó que si Europa “quiere entrar en guerra y la inicia, estamos inmediatamente listos”.

Tras la reunión, al ser preguntado por la propuesta, el principal asesor de Putin, Yuri Ushakov, declaró que el Kremlin “está de acuerdo en algunos puntos… pero también critica otros”. Añadió: “Aún no hemos presentado una versión de compromiso… Queda mucho trabajo por delante”.

Persisten desacuerdos fundamentales entre Moscú y Kiev, incluida la cesión de territorios que Ucrania aún controla y las garantías de seguridad proporcionadas por Europa.

Antes de las conversaciones, Putin criticó duramente a los líderes europeos que han apoyado los esfuerzos defensivos de Kiev desde que Rusia lanzó su invasión a gran escala en 2022.

Dijo que los líderes europeos viven bajo la ilusión de que pueden infligir una derrota estratégica a Rusia. Afirmó además que su país “no planea entrar en guerra con Europa, pero si Europa de repente quiere entrar en guerra y la inicia, estamos inmediatamente listos”.

El presidente ucraniano Volodímir Zelenski afirmó que la delegación estadounidense le informará sobre las conversaciones en el Kremlin; sin embargo, aún no está claro si Witkoff y Kushner viajarán a Kiev o a otras capitales europeas para reuniones presenciales.

La Casa Blanca dijo que las propuestas estaban “bastante refinadas”, pero que los detalles del plan actualizado aún no habían sido confirmados.

Mientras las conversaciones continuaban el martes, Trump dijo a su gabinete en Washington que la disputa no se resolvía fácilmente y la calificó como “un caos”.